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viernes, 25 de noviembre de 2011

Fiestas celtas : Fiesta del sexo

El día de Beltayne, primero de mayo, se iniciaba entre los Irish Gaél un mes de libertad sexual, denominado Cyann, festejando la unión entre el gran dios Cernunnos, representado con una gran cornamenta de ciervo, y la Madre Suprema, la Tierra. En este período, los jóvenes podían formar parejas tentativas, que duraban un máximo de un año y un día, y al cabo de ese tiempo, debían ser refrendadas si deseaban continuar unidos; si la experiencia no era satisfactoria, cualquiera de los dos podía negarse, ya que, de allí en más, el matrimonio se convertía en permanente.
En sus relaciones de pareja, los celtas daban prioridad a la familia sobre  otra consideración, y no concedían demasiada importancia a la virginidad; se estimulaba la actividad sexual entre los jóvenes, especialmente durante la festividad de Cyann, y consideraban a los niños gestados durante este lapso como protegidos de los dioses.
Según la tradición, los responsables de despertar las inquietudes sexuales entre los jóvenes eran las sidh (hadas) y los leprechauns (duendes o elfos), quienes los incitaban a marchar hacia el bosque y pasar allí los días juntos. Durante este período, las mujeres vestían de verde claro, un color que la tradición asignaba a las vestiduras de las hadas, y los jóvenes de verde oscuro, el tono tradicional de los leprechauns, pero a partir del siglo VI d. C., los evangelizadores cristianos comenzaron a difundir la especie de que el verde era de mala suerte, en un fútil intento de que los jóvenes, especialmente las muchachas, abandonaran esa actitud promiscua que, por supuesto, no era bien vista por la Iglesia Católica.

Fiestas celtas : La fiesta de Beltayne

Beltayne o Beltuin, era el primero de mayo. Era una festividad consagrada al dios Belenos y a la Madre Suprema, o Señora del Bosque. Literalmente significa “el fuego de Bel”, se conmemora durante la noche del 31 de abril al primero de mayo, y un homenaje de agradecimiento a los dioses familiares, por haber protegido los fuegos del hogar, como así también un augurio de primavera.
Es una fiesta característica de los pueblos agrícolas y pastoriles, ya que llega la fecha de la siembra y de sacar las manadas a pastar. En Alemania y algunos países anglosajones, la noche previa se conmemoraba la Noche de Walpurgis,en que se intentaba conjurar a los seres malignos que se reunían en las colinas elevadas. Los romanos asimilaron Beltayne con las Laridae, es decir, sus propias fiestas en honor a los dioses lares, protectores del hogar.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Fiestas celtas : Samhain

Samhain fue originariamente una festividad de los muertos, celebrada durante la última noche del año druídico, es decir, la del 31 de octubre, precedente al Día de Todos los Santos. Hasta épocas relativamente recientes, en muchas partes de Europa existía la creencia -probablemente originada en esta festividad celta- de que en la noche de Samhain, las brujas y hechiceros efectuaban sus peores conjuros, y se encendían grandes fuegos para mantener lejos de los hogares a los espíritus malévolos.
Es la festividad opuesta a la de Beltayne, ya que en ella se escenifica el encierro del ganado para el invierno, y se encienden simbólicamente los fuegos del hogar. Posteriormente, a partir del siglo XVll, el cristianismo fue incorporando aportes propios, y la fiesta de Halloween se transformó en un festejo infantil, en el que los niños recorren las casas vecinas, disfrazados de duendes, a solicitar golosinas.

El calendario druida

Este calendario lo determinaban  las fases de la luna, por lo que cada mes contaba con una mitad positiva, luminosa y ascendiente, que correspondía a la luna en cuarto creciente y llena, mientras que la mitad oscura, decadente y negativa se correspondía con las fases de luna menguante y nueva; de la misma forma, durante el período brillante se llevaban a cabo los conjuros y hechizos de magia blanca, mientras que las ceremonias secretas de magia negra tenían lugar en las fases oscuras. 

Cada uno de los meses del año, 12 en total, tenía asignada una letra del alfabeto Ogham, y estaba consagrado a un árbol o planta determinada, a la cual se veneraba durante este lapso.
También conocían la duración y división del año solar, es decir el tiempo que tarda la tierra en recorrer su órbita alrededor del sol, y lo aplicaban para recomendar a su pueblo las fechas para la siembra y la cosecha de los distintos productos agrícolas.
Para compensar la diferencia entre el año solar y el lunar, los druidas establecieron la inserción entre abril y mayo de un mes extra de 30 noches cada tres años (el registro del tiempo se llevaba en función de las noches, y no de los días). Al igual que meses, los años también contaban con una mitad oscura y una brillante; la primera de ellas comenzaba inmediatamente después de la última noche del año, el primero de noviembre, con la fiesta deSamhain (Samhuyn), de la que proviene la actual festividad de Halloween.

Fiestas celtas : La fiesta de Eisteddfod

Los celtas, al igual que otros pueblos de la antigüedad, celebraban sus fiestas y ritos con los cambios de estación. Siguiendo pues, el ritmo de las cuatro estaciones tenemos las cuatro fiestas celtas más sonadas; la de Samhain, Beltayne, Ymbolc, y Lugnasad, en ellas el hombre celta se abría a los poderes de la fertilidad, la purificación, el contacto con el mundo invisible de los muertos y la veneración del dios Lug.

La fiesta de Eisteddfod

Un ejemplo de la perdurabilidad de las costumbres y tradiciones celtas hasta nuestros días es el festival de Eisteddfod, término derivado del gaélico eístedd: “sentarse” y fod: “reunión” o “competencia”.
Aunque algunos autores niegan su aparición antes del siglo VII, existen evidencias para suponer que estas reuniones de bards (bardos) se realizaban ya en el siglo IV, aunque, probablemente, al principio hayan estado circunscritas a los bardos iniciados, y no pudiera participar de ellas el común de la población, como sucedió más adelante.
A partir del siglo VII, en la región de Gales, al sudoeste de la mayor de las Islas Británicas, Eisteddfod comenzó a convertirse en una reunión abierta, destinada a promover las tradiciones y la lengua galesa a través de interpretaciones competitivas de drama, música y poesía, hasta que, a fines del siglo XIII, Eduardo l, Rey de Inglaterra, provocó una verdadera masacre en la comunidad de los bardos, por temor a su acendrado nacionalismo.
Sin embargo, tres siglos después, hacia fines del 1500, Isabel I de Inglaterra cobró un repentino interés por Eisteddfod y, gracias a su mediación, los festivales fueron restablecidos a partir del siglo XVII, bajo patronazgo real. Las competencias, ahora de alcance nacional e internacional, decayeron durante el siglo XVlll, pero un renovado interés en el druidismo y el misticismo revivió la tradición en el siglo XlX. En la actualidad, Eisteddfod aún se reedita año tras año, poniéndose un especial énfasis en la conservación de la pureza de la lengua galesa.

martes, 22 de noviembre de 2011

Dioses Celtas: Cernnunos

Puede significar “el de la cornamenta” o “el de la cabeza de ciervo”, de modo general, pues este punto ha sido muy discutido por los estudiosos de la temática celta. Se cree que es una entidad precelta y se destaca porque el dios aparece con las piernas cruzadas en “la posición de Buda”. Así aparece en el caldero de Gudestrup y en los monumentos de Reims y de Saintes, entre otros. Lleva un torques en el cuello y, en la mano, una manzana o algo parecido a una bolsa. Rodeado de animales salvajes, se destaca una serpiente,-generalmente con cabeza de cordero-, en una de sus manos o bien alrededor de su cuello. Hay quien cree que era un dios de los cazadores mientras otros creen que era el protector de los animales dotados de cuernos. El ciervo aparece como símbolo de fuerza positiva aunque incluso alguien lo relacione con el mundo de los muertos. En el medioevo, en algunas historias, el ciervo vencía al dragón. De modo general se le entiende como rey o dios de los animales, o bien el dios de la magia de la caza o del renacimiento de la naturaleza. Sin embargo, los tres conceptos a un tiempo, resultan incompatibles. Respecto a sus representaciones, para que puedan dar alguna luz sobre su función concreta, se pueden hacer referencia a tres:En Reims: Cernunnos libera de una bolsa un “flujo” que parecen granos o bien mondas. Un ciervo y un toro se nutren de él y una rata, colocada sobre el gurpo, parece esperar.En París: el pilar de los Nautres de los Parisii lo representa sobre el “dado Cástor-Pollux-Sertrios. Vemos el busto de Cernunnos, calvo y barbudo, los candiles ornamentados con dos torques o con pulseras. En Gundesturp los eruditos hicieron conjeturas sobre la procedencia del famoso caldero. En esa pieza Cernunnos reina, sentado con las piernas cruzadas, la cabeza cubierta por dos inmensos cuernos, sostiene en su mano derecha un torques y en la izquierda hay una serpiente con la cabeza de Aries. Un ciervo está a su lado y animales salvajes y peces lo rodean.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Dioses Celtas: Dagda

Su nombre significa “Buen dios” como dios capaz y certero, no en el sentido de bondad. Es el señor del entendimiento y soberanamente fecundo. También es conocido como “Eochu Ollanthir”, que significa “padre universal”. Siendo Sucellos su equivalente galo, posee un mazo (originariamente una porra) que tiene la propiedad de matar por un extremo y resucitar por el otro. También posee un caldero de la abundancia del que “nadie se aleja sin ser saciado” y que, igualmente, tenía capacidad para resucitar a los muertos cuyos cuerpos eran sumergidos en él. Es también el dios de la concepción intelectual, el dios-druida de ciencia perfecta. Otro de sus nombres, “Ruad Rofheasach” (Rojo omniscente) es una alusión a su sitio preponderante en el panteón. Hay quien añade que, junto con la maza y el caldero, el arpa es otro de sus signos-atributos. Es un arpa de oro, es decir, solar, núcleo de toda luz; un instrumento que, al oírlo, puede producir llanto, risa gozosa o adormecimiento. Además, el arpa acude rauda a Dagda cada vez que éste reclama su presencia, tal que si fuera un pájaro, y emite su música sin que nadie la pulse. En cuanto a los amores de este dios, muy numerosos pues tendía, inevitablemente, a la promiscuidad, se encuentra Boann, su cuñada, casada con su hermano Elcmar. Para poder yacer con ella envía a su hermano a visitar a su yerno Bres y, para gozar con la mujer, detiene el tiempo para su hermano mientras para ambos amantes pasan nueve meses cuyo fruto es Oengus, su hijo, que significa “fuerza única”. Curiosamente cuando el hermano regresa y se encuentra la criaturilla, nada pregunta. De igual forma Dagda es considerado, entre otras paternidades, el progenitor del rey Bodb y de Cermat, padre de Mac Cuill, uno de los tres soberanos que reinaron en Irlanda. En ocasiones también aparece como padre de Brigit en su triple faz: como dama de la fecundidad, como señora de la medicina y los saberes, y como maestra de la lanza.

Dioses Celtas: Lug

Se cuenta de este dios que nadie podía soportar el resplandor de su rostro, una característica que lo pone en relación con el sol. De hecho su propio nombre indica “luminoso”. Es el señor de las artes, tanto en tiempo de paz como de guerra, tal es así que su lanza siempre acertaba el blanco. Su arco era el arco iris y la vía Láctea se llamaba, en Irlanda, “La cadena de Lug”, lo cual relacionan, algunos estudiosos, con el camino de Santiago. Su presencia en la Galia, Irlanda y País de Gales es muy distinta. Por ejemplo en la Galia se le recuerda poco pero sobre todo se le sigue la pista en el nombre de algunas ciudades: Lugdunum (Lyon: la fortaleza de Lug). Se cuenta que la ciudad fue fundada en la localización designada por el vuelo de unos cuervos. Las ciudades Ludun, Laon, Lugon, Lugo, son muestra de su presencia.En Irlanda, sin embargo, Lug está presente en gran parte de su mitología. Se cuenta que, una vez que el rey Nuada volvió al trono, tras ser expulsado Bres, y en medio de una guerra de represalias entre los Tuatha Dé y los Fomore, Lug apareció en solitario ante la puerta del castillo de Nuada y el portero le preguntó qué cualidades pretendía tener para ser admitido entre los dioses. Lug dice, por el siguiente orden, que es “carpintero, herrero, soldado, arpista, poeta, brujo, médico, posadero y broncista”. Sin embargo el portero no le deja pasar pues le contesta que, dentro, ya hay dioses con todas esas capacidades, a lo que Lug matiza que él también las tiene, pero todas juntas. Entonces se le permite pasar y el rey Nuada le desafía a una partida de ajedrez, que Lug gana. Nuada le concede entonces de forma simbólica el trono y lo declara “Samhildanach”, osea, “politécnico” y le deja quedar, en pie, a su lado. A partir de aquí Lug se encarga de hacer el inventario para las batallas y organizar los combates. Lug está armado con una lanza y con una honda. Con esta última mata al gigante Balor, su abuelo materno, reventándole el ojo con una piedra, una de las principales razones por la que fue llamado Lug Lam-Fada “de larga mano”. Tras perder su última batalla, Bres se somete a los dioses irlandeses y promete, a cambio de su vida, prosperidad eterna para Irlanda. En este país se celebra, el 1 de agosto, “Lugnasad” o asamblea de Lug, que algunos eruditos definen como la boda de Lug con la Diosa-Madre. Esta fiesta siguió existiendo hasta después de la cristianización en Irlanda. Finalmente, y respecto al País de Gales, el equivalente es Lleu Llaw Gyffes “el de la mano viva”. Aparece en el Mabinogion de Math, como el hijo incestuoso de Gwydion, el Dagda galés, y de Arianrhod (“Rueda de Plata”), su hermana. Al nacer, Lleu es escondido por su padre y educado en secreto. Una vez ha crecido, su madre lo maldice más, a pesar de esta maldición que le prohibe, entre otras cosas, casarse con una mujer nacida de un hombre, se une a Blodeuwedd (“rostro de flor”), nacida de la magia de Gwydion y del rey Math. La historia no tiene un buen final pues resulta que Blodeuwedd no le es fiel y toma como amante a Gronw Pebyr quien, tratando de matar al honrado esposo, le hiere con una lanza. Lleu se salva, sana y mata a su rival con un golpe de lanza mágica. En lo que respecta a la esposa infiel, es castigada convirtiéndola en lechuza

miércoles, 16 de noviembre de 2011




La cruz celta es un icono religioso que combina una cruz cristiana con un círculo rodeando su intersección. Se remonta a los primeros tiempos del cristianismo en Irlanda, donde constituyó el diseño básico de las famosas high crosses: altas cruces monumentales hechas de piedra y ricamente ornamentadas con motivos de arte céltico insular.

Esencialmente no es sino una cruz cristiana con el significado que le es propio. La finalidad del anillo, sin embargo, continúa siendo un misterio en torno al cual se ha especulado mucho.
Una leyenda popular en Irlanda afirma que la cruz "celta" fue introducida por San Patricio u otro santo irlandés durante la evangelización de los paganos de la isla, pero no subsiste ninguna cruz procedente de esa temprana época. También se dice que San Patricio unió el símbolo cristiano a una representación circular del sol o de la luna, vinculando así el significado de la cruz a la espiritualidad pagana a fin de transmitir mejor su mensaje. Otros consideran más probable un origen en cruces con coronas de hojas o flores en torno a su intersección.
La explicación aceptada por la mayoría de historiadores, sin embargo, resulta menos prosaica: el anillo habría sido inicialmente un mero recurso de los escultores para asegurar la estabilidad de las cruces, convirtiéndose luego en un elemento decorativo.
Sus funciones eran religiosas y conmemorativas. Se alzaban en el exterior de los monasterios y lugares de culto cristianos, a modo de monumentos identificativos y centros de predicación. Muchas eran asimismo un símbolo de estatus relacionado con determinados personajes ilustres (abades y patrocinadores). Se desconoce cualquier otro uso que pudieran haber tenido

No todas las high crosses poseen el característico anillo, aunque sí la mayoría.
En cuanto a sus grabados, las más tempranas sólo muestran entrelazados y diseños geométricos propios del arte nativo de las islas británicas, pero a partir de los siglos IX y X aparecen representaciones figurativas de escenas bíblicas. Estas cruces son llamadas Scriptures crosses ("Cruces de las Escrituras") y su complejidad es tal que se las ha llegado a definir como "sermones en piedra".
Las cruces de Inglaterra presentan una estética mixta, fusionada con la tradición similar de las cruces anglosajonas.


Las primeras cruces datan del siglo VII y no son high crosses, sino grabados en grandes piedras planas extendidas en el suelo. Las cruces propiamente dichas fueron erigidas por los monjes irlandeses al menos desde el siglo VIII, primero en Irlanda (donde sobreviven la mayoría) y más tarde en Gran Bretaña(conservándose en Cornualles, Gales, Northumbria, Escocia, archipiélago de las Hébridas e isla de Iona).
Las cruces celtas (anilladas) dejaron de erigirse en el siglo XII y la tradición más amplia de las grandes cruces conmemorativas de piedra se interrumpió definitivamente en el siglo XV.
Las cruces celtas fueron resucitadas mucho más tarde durante el llamado "renacimiento celta" (celtic revival) del siglo XIX, muy influido por el romanticismo y por el nacionalismo irlandés. Desde entonces vuelven a alzarse cruces celtas en Irlanda, sobre todo con propósitos funerarios (reminiscencia de su antiguo uso conmemorativo). El símbolo en sí se ha convertido en un típico emblema irlandés y como tal aparece en joyería, logotipos, etc.
Una forma estilizada de la cruz celta parecida a una cruz solar es empleada actualmente por diversos grupos ultraderechistas, neonazis y supremacistas de Europa y del resto del mundo. Este uso se sitúa en un marco de recuperación de símbolos paganos (en el caso de la cruz celta, un símbolo cristiano primitivo visto como herencia pagana) para legitimar ideologías identitarias, en una voluntad de rechazo a las religiones procedentes del tronco semítico y de retorno a las culturas de los viejos pueblos europeos precristianos.






La cruz celta es un icono religioso que combina una cruz cristiana con un círculo rodeando su intersección. Se remonta a los primeros tiempos del cristianismo en Irlanda, donde constituyó el diseño básico de las famosas high crosses: altas cruces monumentales hechas de piedra y ricamente ornamentadas con motivos de arte céltico insular.

Esencialmente no es sino una cruz cristiana con el significado que le es propio. La finalidad del anillo, sin embargo, continúa siendo un misterio en torno al cual se ha especulado mucho.
Una leyenda popular en Irlanda afirma que la cruz "celta" fue introducida por San Patricio u otro santo irlandés durante la evangelización de los paganos de la isla, pero no subsiste ninguna cruz procedente de esa temprana época. También se dice que San Patricio unió el símbolo cristiano a una representación circular del sol o de la luna, vinculando así el significado de la cruz a la espiritualidad pagana a fin de transmitir mejor su mensaje. Otros consideran más probable un origen en cruces con coronas de hojas o flores en torno a su intersección.
La explicación aceptada por la mayoría de historiadores, sin embargo, resulta menos prosaica: el anillo habría sido inicialmente un mero recurso de los escultores para asegurar la estabilidad de las cruces, convirtiéndose luego en un elemento decorativo.
Sus funciones eran religiosas y conmemorativas. Se alzaban en el exterior de los monasterios y lugares de culto cristianos, a modo de monumentos identificativos y centros de predicación. Muchas eran asimismo un símbolo de estatus relacionado con determinados personajes ilustres (abades y patrocinadores). Se desconoce cualquier otro uso que pudieran haber tenido

No todas las high crosses poseen el característico anillo, aunque sí la mayoría.
En cuanto a sus grabados, las más tempranas sólo muestran entrelazados y diseños geométricos propios del arte nativo de las islas británicas, pero a partir de los siglos IX y X aparecen representaciones figurativas de escenas bíblicas. Estas cruces son llamadas Scriptures crosses ("Cruces de las Escrituras") y su complejidad es tal que se las ha llegado a definir como "sermones en piedra".
Las cruces de Inglaterra presentan una estética mixta, fusionada con la tradición similar de las cruces anglosajonas.


Las primeras cruces datan del siglo VII y no son high crosses, sino grabados en grandes piedras planas extendidas en el suelo. Las cruces propiamente dichas fueron erigidas por los monjes irlandeses al menos desde el siglo VIII, primero en Irlanda (donde sobreviven la mayoría) y más tarde en Gran Bretaña(conservándose en Cornualles, Gales, Northumbria, Escocia, archipiélago de las Hébridas e isla de Iona).
Las cruces celtas (anilladas) dejaron de erigirse en el siglo XII y la tradición más amplia de las grandes cruces conmemorativas de piedra se interrumpió definitivamente en el siglo XV.
Las cruces celtas fueron resucitadas mucho más tarde durante el llamado "renacimiento celta" (celtic revival) del siglo XIX, muy influido por el romanticismo y por el nacionalismo irlandés. Desde entonces vuelven a alzarse cruces celtas en Irlanda, sobre todo con propósitos funerarios (reminiscencia de su antiguo uso conmemorativo). El símbolo en sí se ha convertido en un típico emblema irlandés y como tal aparece en joyería, logotipos, etc.
Una forma estilizada de la cruz celta parecida a una cruz solar es empleada actualmente por diversos grupos ultraderechistas, neonazis y supremacistas de Europa y del resto del mundo. Este uso se sitúa en un marco de recuperación de símbolos paganos (en el caso de la cruz celta, un símbolo cristiano primitivo visto como herencia pagana) para legitimar ideologías identitarias, en una voluntad de rechazo a las religiones procedentes del tronco semítico y de retorno a las culturas de los viejos pueblos europeos precristianos.



martes, 15 de noviembre de 2011

EL NACIMIENTO DE FINN MAC CUMHAILL

Cumhall MacArt fue un gran campeón en el oeste de Irlanda, y se profetizó sobre él que si llegaba a casarse hallaría la muerte en la siguiente batalla que librase.

Por ese motivo no tenía esposa y no conoció mujer durante largo tiempo. Hasta que, un día, vio a la hija del rey, la cual era tan bella que Cumhal se olvidó de todos sus temores y la desposó en secreto.
Al día siguiente del matrimonio, llegaron nuevas de que había que entablar una batalla.
Sucedió también que un druida le había dicho al rey que el vastago de su hija le arrebataría el reino; de modo que resolvió vigilar a su hija y no dejar que ningún hombre se le aproximara.
Antes de entrar en combate, Cumhal le contó todo a su madre, le habló de sus relaciones con la hija del rey. Le dijo:
-Hoy moriré en la batalla, según la profecía del druida, y temo que si la princesa tiene un niño el rey lo matará, pues dice la profecía que perderá el reino a causa del vas­tago de su propia hija. En caso de que la hija del rey tenga un varón, ocúltalo y crí

Cumhall 

alo, si puedes; tú serás su única esperanza y sostén.
Cumhal pereció en la batalla, y ese mismo año la hija del rey tuvo un varón.
Por orden de su abuelo, el mismo día de su nacimiento

.El niño fue arrojado a un lago por una de las ventanas del castillo para que se ahogase.
El bebé se hundió y desapareció de la vista, pero tras permanecermanecer algún tiempo bajo el agua volvió a emerger y gano la orilla sujeto a un salmón vivo.
La m adre de Cumhal, abuela del niño, permanecía vigilante junto a la orilla y al contemplar aquello se dijo: «Es mi nieto oto, el verdadero vastago de mi propio hijo.» Y lomando al niño se escapó con él, desapareciendo antes de que los hombres del rey pudieran detenerla.
Cuando el rey supo que la anciana había escapado con el hijo de la princesa, montó en cólera y ordenó que se dieta muerte a todos los varones nacidos aquel día en el reino, esperando de este modo matar a su propio nieto y conser­var la corona.
Tras desaparecer de la orilla del lago, la anciana, madre de Cumhal, se adentró en un espeso bosque donde pasó la noche lo mejor que pudo. Al día siguiente llegó junto a un gran roble. Entonces contrató a un hombre para que hicie­ra una recámara dentro del árbol.
Cuando hubo terminado, y quedó en el roble espacio suficiente para ella y su nieto, así como para un cachorro -de la misma edad que el muchacho-, que ella había traído del castillo, la anciana le dijo al hombre:
-Dame ese hacha que llevas, hay algo aquí que quiero arreglar.
El hombre puso el hacha en sus manos y en ese instante la mujer le cortó la cabeza diciendo:
-Ahora ya no le hablarás a nadie de este lugar.
Un día, el cachorro se comió algunas de las virutas (bran) que habían quedado cuando el hombre vació el árbol. La anciana dijo:
-Por esto, en adelante, te llamarás Bran.
Los tres vivieron juntos en el árbol, y la anciana no sacó
a su nieto al exterior hasta pasados cinco años; al haber permanecido tanto tiempo sentado dentro del árbol, el niño no podía caminar.
Un día, cuando la anciana hubo enseñado a caminar al niño, lo llevó a la cresta de una colina desde la que des­cendía una larga ladera. Tomó una vara y dijo:
-Ahora, baja corriendo. Yo te seguiré y te golpearé con esta vara; al subir yo correré delante, y tú me gol­pearás cuantas veces puedas.
La primera vez que descendieron, la abuela lo golpeó muchas veces. Al ascender la primera vez, él no alcanzó a golpearla en ninguna ocasión. Cada vez que descendían ella lo golpeaba menos y cada vez que subían él la golpea­ba más.
Estuvieron tres días bajando y subiendo, y al cabo de este tiempo ella no pudo golpearlo ni una vez y él le pro­pinaba un golpe a cada paso que ella daba. Se había con­vertido en un gran corredor.
Cuando el muchacho cumplió quince años, la anciana lo acompañó a un juego de hurling entre los hombres de su abuelo y los de un rey vecino. Ambos bandos estaban igualados en pericia, y ninguno era capaz de ganar hasta que el muchacho se opuso a las huestes de su abuelo. Entonces ganó todos los juegos.
Cuando la pelota era lan­zada al aire, él la golpeaba al descender, y esto sucedió una y otra vez, sin dejar nunca que la pelota tocara el suelo hasta hacer que franquease la barrera.
El viejo rey, que estaba muy furioso y humillado por la derrota de los suyos, exclamó al ver al muchacho, que era muy bello y tenía el cabello blanco:
-¿Quién es ese fin cumhal (gorro blanco)?
-Ah, eso es. Se llamará Finn, pues Finn Mac Cumhaill es -dijo la anciana para sí.
El rey ordenó a sus guerreros que prendieran al mucha-

le diesen muerte allí mismo. La anciana corrió junto
. mi nieto. Ambos se escabulleron entre la multitud y
emprendieron la huida, franqueando una colina a cada sal-to, un valle a cada paso y treinta y dos millas a cada zan­ cuda.
Recorrieron un gran trecho hasta que Finn se cansó; entonces la anciana se lo echó a la espalda, introduciendo
ir pies en los dos bolsillos de su traje, uno a cada lado, y
I puso a correr con la misma ligereza que antes, una coli-
na a cada salto, un valle a cada paso y treinta y dos millas
a cada zancada.
Pasado un tiempo, la anciana presintió la proximidad de los perseguidores y le dijo a Finn: -Mira a tu espalda y dime lo que ves. -Veo -dijo él- un caballo blanco con un campeón
en la grupa.
-Oh, nada temas -replicó ella-, un caballo blanco no tiene resistencia, nunca nos alcanzará. De él estamos a
salvo.
Y siguieron corriendo. Por segunda vez ella sintió la proximidad de los perseguidores y le dijo nuevamente:
-Mira a tu espalda y dime quién viene.
Finn miró hacia atrás y respondió:
-Veo a un guerrero cabalgando sobre un caballo
marrón.
-Nada temas -aseguró la anciana-, no hay caballo marrón que no sea atolondrado. No puede alcanzarnos.
Siguió corriendo como antes. Por tercera vez dijo:
-Mira a tu espalda y dime quién viene ahora.
Finn miró para luego contestar:
-Veo a un guerrero negro sobre un corcel negro, que nos sigue a toda prisa.
-No hay caballo más resistente que un caballo negro -dijo la abuela-. De éste no hay escapatoria. Nieto, uno de los dos, o ambos, ha de morir. Yo soy vieja y mi hora
casi ha llegado. Moriré; salvaos tú y Bran (Bran había estado con ellos todo el tiempo). Justo delante de aquí hay una turbera profunda, que me cubrirá hasta el cuello, y cuando vengan los hombres del rey les diré que tú estás en la turbera debajo de mí, tan hondo que no se te ve, y que estoy intentando encontrarte.
Puesto que tu cabello y el mío son del mismo color, se conformarán con llevar mi cabeza. Me la cortarán, se la llevarán en lugar de la tuya y se la mostrarán al rey. Esto aplacará su cólera.
Bajando al suelo, Finn se despidió de su abuela y salió corriendo junto a Bran. La anciana se dirigió a la turbera, saltó en ella y se hundió hasta el cuello. Los hombres del rey no tardaron en llegar hasta el borde de la turbera, y el jinete negro le gritó a la anciana:
-¿Dónde está Finn?
—Está aquí debajo, en la turbera, y trato de encontrarlo.
Como los jinetes no pudieron encontrar a Finn y pensaron que bastaría con llevar la cabeza de la anciana, se la cortaron y la llevaron consigo, diciéndose:
—Esto satisfará al rey.
Finn y Bran siguieron corriendo hasta llegar a una enorme cueva, en la que encontraron un rebaño de cabras. En el otro extremo de la cueva ardía fuego. Los dos se echaron a descansar. Dos horas más tarde, entró un gigante que llevaba un salmón en la mano. El gigante era terriblemente alto, pero no tenía más que un ojo, en medio de la frente, tan grande como el sol del cielo.
Cuando vio a Finn, exclamó:
—Tú, coge este salmón y ásalo; pero ten cuidado, porque si haces que le salga una sola ampolla te cortaré la cabeza. He seguido a este salmón durante tres días y tres noches sin tregua y jamás dejé que escapara de mi vista, pues es el salmón más extraordinario del mundo.
42

líl gigante se echó a dormir en medio de la cueva. Finn esperi el salmón y lo sostuvo sobre el fuego.
Apenas cerrado el único ojo de su cabeza, el gigante comenzo a roncar.
Cada vez que introducía aire en su cuerpo, arrastraba hacia su boca a Finn, el espetón, el salmón, a Bran y a todas las cabras, y cada vez que exhalaba aire lucra de sí, arrojaba todo al lugar anterior.
Una y otra vez, Finn se vio arrastrado hacia la boca del gigante con tal fuerza que temía acabar dentro de su gaznate.
Cuando estaba en parte asado, apareció una ampolla sobre el salmón.
Finn apretó el sitio con su pulgar, por si había modo de romper la ampolla y ocultarle al gigante el daño causado.
Pero se le quemó el dedo y, para calmar el dolor, se lo puso entre los dientes y royó la piel hasta la carne, la carne hasta el hueso y el hueso hasta la médula, y cuando probó la médula recibió conocimiento de todas las cosas.
Al instante se vio arrastrado por el aliento del gigante hasta su misma cara y, sabiendo lo que tenía que hacer, gracias a su pulgar, hundió el espetón ardiente en el ojo del dormido gigante y se lo destrozó.
En este mismo momento el gigante, de un solo salto, estaba en la entrada de la cueva y, erguido con la espalda contra el muro y un pie a cada lado de la abertura, rugió:
—No saldrás vivo de aquí.
Entonces Finn mató la mayor de las cabras, la despellejó lo más rápido que pudo y, poniéndose la piel por encima, condujo el rebaño hasta donde estaba el gigante.
Las cabras pasaron una a una entre sus piernas, pero cuando le tocó el turno a la cabra mayor el gigante la tomó de los cuernos. Finn se deslizó fuera de la piel y salió
corriendo.
—Oh, te has escapado —dijo el gigante—, pero antes de despedirnos deja que te haga un regalo.
—Tengo miedo de acercarme a ti —dijo Finn—; si
quieres hacerme un regalo ponlo ahí y luego vuelve adon­de estás.
El gigante puso un anillo en el suelo y luego volvió adonde estaba.
Finn tomó el anillo y se lo puso en el extre­mo del dedo meñique, por encima de la primera articula­ción. El anillo se aferró tan firmemente al dedo que nadie hubiese podido arrancarlo de él.
El gigante gritó entonces:
-¿Dónde estás?
-En el dedo de Finn -exclamó el anillo.
Al momento el gigante saltó sobre Finn, con la inten­ción de aplastarlo y hacerle pedazos, y casi cayó sobre su cabeza. Finn se apartó de un brinco.
El gigante volvió a preguntar:
-¿Dónde estás?
-En el dedo de Finn -insistió el anillo.
Una vez más el gigante dio un salto y cayó justo delan­te de Finn. Muchas veces el gigante llamó al anillo y muchas veces estuvo a punto de atrapar a Finn, quien no podía escapar con el anillo en el dedo.
Mientras estaba sumido en esa terrible lucha, sin saber cómo escapar, Bran corrió hasta él y le dijo:
-¿Por qué no chupas tu dedo?
Finn se mordió el dedo hasta llegar a la médula y enton­ces supo lo que debía de hacer.
Tomó el cuchillo con el que había despellejado a la cabra, se cortó el dedo a la altura de la primera articulación y, con el anillo todavía adherido, lo arrojó a una turbera cercana.
Una vez más, el gigante exclamó: -¿Dónde estás? Y el anillo respondió: -En el dedo de Finn.
Al instante el gigante saltó sobre la voz, se hundió has­ta los hombros en la turbera y allí se quedó.

Finn y Bran prosiguieron su camino y viajaron hasta llegar a un bosque denso y profundo, en el que mil caballos arrastraban troncos y unos hombres derribaban arbolen y los dejaban listos para su uso.
¿Qué es esto? -le preguntó Finn al capataz de los
trabajadores.
-Pues estamos construyendo un dun para el rey; construimos uno cada día, y cada noche arde hasta los cimientos.
Nuestro rey tiene una única hija. Le dará la mano al hombre que salve el dun, y a su muerte le legará el reino.
Si alguien intenta salvar el dun y fracasa, deberá pagarlo ron la vida: el rey le cortará la cabeza. Los mejores campeones de Irlanda lo han intentado y han fracasado; ahora yace en las mazmorras del rey todo un ejército de ellos, aguardando a lo que el soberano disponga. En un solo día les cortará la cabeza a todos.
-¿Por qué no te chupas tu dedo? -preguntó Bran. Finn se chupó el dedo hasta la médula y entonces supo que en la parte oriental del mundo vivía una vieja decrépi-la con sus tres hijos, y que cada día, al caer la noche, enviaba al más joven a quemar el dun del rey.
-Yo salvaré el dun del rey -aseguró Finn. -Bien -repuso el capataz-. Hombres mejores que tú lo han intentado y están en trance de perder la vida. -Oh -dijo Finn-, no tengo miedo. Lo intentaré por
la hija del rey.
De modo que Finn, seguido por Bran, fue con el capa­taz a ver al rey.
-Ha llegado a mis oídos que entregarás a tu hija al hombre que salve tu dun -dijo Finn.
-Así es -respondió el monarca-, pero mía será la cabeza de quien fracase.
-Bien -dijo Finn-, por tu hija arriesgaré mi cabeza. Si fracaso me conformaré.

El rey dio comida y bebida a Finn. Éste cenó y, concluida la cena, se dirigió al dun.
—¿Por qué no te chupas tu dedo? —preguntó Bran—. Entonces sabrás exactamente lo que hay que hacer.
Así lo hizo. Después Bran se subió al tejado del dun, para aguardar al hijo de la anciana. Entonces la vieja de Oriente le dijo al menor de sus hijos que se apresurase a partir con las antorchas, quemase el dun y regresara sin demora, pues el puchero de gachas hervía y no debía retrasarse para la cena.
El hijo tomó las antorchas y salió disparado por los aires a una velocidad portentosa. Pronto tuvo a la vista el dun del rey, arrojó las antorchas sobre el tejado de paja y, como de costumbre, le prendió fuego.
En ese momento Bran pegó tal empujón a las antorchas con los hombros que éstas cayeron a un arroyo que discurría alrededor del dun y se apagaron.
—¿Quién ha sido? —exclamó el hijo menor de la vieja—• ¿Quién ha apagado mis antorchas y se ha entremetido en mis derechos ancestrales?
—¡Yo! —respondió Finn, que estaba delante de él.
Entonces se inició una terrible y cruenta batalla entre Finn y el hijo de la anciana. Bran bajó del tejado del dun para ayudar a Finn. Mordió y desgarró la espalda de su enemigo, arrancándole la piel y la carne desde la cabeza hasta los talones.
Tras una lucha encarnizada como no la hubo en el mundo antes de aquella noche, Finn le cortó la cabeza a su enemigo. Pero de no haber sido por Bran, Finn jamás habría triunfado.
La hora del regreso de su hijo había pasado y la cena estaba lista. Impaciente e irritada, la anciana le dijo al segundo de sus hijos:
—Coge tú las antorchas y apresúrate; averigua qué

entretiene a tu hermano. ¡Me las pagará cuando vuelva a . na! Pero guárdate de hacer como él o también tendrás tu merecido.
Date prisa en volver porque el puchero hierve y la cena está lista.
El segundo de los hijos de la anciana partió, se encontró con Finn y fue muerto exactamente de la misma manera que su hermano, salvo que era más fuerte y el combate fue mas feroz.
De no haber sido por Bran, Finn hubiese perdido la vida aquella noche.
La anciana estaba furiosa por el retraso, y le dijo al mayor de sus hijos, que no había salido durante diez años de la casa (sólo lo enviaba en caso de extrema necesidad.
Tenía cabeza de gato y le llamaban Pus an Chuine, «El Gatito del Rincón»; era el mayor y más fuerte de los hermanos):
—Toma las antorchas y ve a ver qué entretiene a tus hermanos. Cuando vuelvan a casa me las pagarán.
El hermano mayor salió disparado por los aires, llegó hasta el dun del rey y arrojó sus antorchas sobre el techo. Apenas habían chamuscado ligeramente la paja cuando Bran las empujó con tal fuerza que cayeron al arroyo y se apagaron.
—¿Quién es —chilló Cabeza de Gato—el que osa interferir en mis derechos ancestrales? —¡Yo! —gritó Finn.
También fue vencido, como los anteriores. En vista de la tardanza la vieja decidió tomar cartas en el asunto, partiendo ella misma con las antorchas incendiarias para culminar la obra que, por lo visto, sus descendientes no habían sido capaces de llevar a término.
Y hubo de enfrentarse a Finn, como es obvio. La bruja profirió un grito que se escuchó en todo el mundo y se enzarzó con el héroe. Entonces tuvo lugar un combate como la Tierra no había conocido hasta aquella noche,
ni ha conocido después. Brotó agua de las piedras grises, las vacas expulsaron violentamente a sus terneros incluso cuando no los tenían y en los rincones más remotos de Irlanda los juncos más duros se volvieron blandos; tan desesperada y terrible fue la lucha entre Finn y la vieja.
De no haber sido por Bran, Finn habría perecido aquella noche.
Justo cuando llegaba la primera luz del día Finn segó la cabeza de la bruja y, exhausto por los terroríficos comba­tes que había librado, se desplomó, quedando profunda­mente dormido.
Mientras dormía, el mayordomo principal del rey llegó al dun,vio que seguía en pie sin daño alguno y, al ver a Finn allí dormido, supo que él lo había salvado. Bran intentó despertar a Finn, tiró de él y lo empujó, pero no pudo reanimarlo.
El mayordomo fue a ver al rey y le dijo:
-He salvado el dun y reclamo mi recompensa.
-Te será entregada -respondió el monarca.
Y al instante el mayordomo fue reconocido como yerno del rey, y dieron orden de que se preparasen los espon­sales.
Bran había escuchado lo sucedido, y cuando su amo se despertó le dijo lo que estaba teniendo lugar en el castillo del rey. Finn se presentó ante él y le dijo:
-Yo soy quien ha salvado tu dun y a quien le corres­ponde la recompensa; la exijo.
-Oh -respondió el rey-, mi mayordomo ha exigido la recompensa y le ha sido concedida.
-Insisto en que yo he sido el salvador de tu dun y la recompensa es a mí, exclusivamente, a quien le pertenece. Espero que hagas justicia.
-Trato de ser justo, como hago siempre. El ha sido el primero que me ha dicho que el dun estaba a salvo y ha reclamado la recompensa.

Hazlo venir aquí -dijo Finn-. Quiero echarle una mirada
Se mandó buscar al mayordomo y éste vino.
-¿Has salvado tú el dun del rey? -preguntó Finn. -Así ha sido.
-No es cierto, y toma esto por haber mentido -dijo I uní. golpeando al otro con el borde de su mano abierta le separó la cabeza del cuerpo, enviándola al otro lado de la habitación y aplastándola contra el muro como si fuera una masa.
-Has sido tú -le dijo el rey a Finn- quien ha salvado el dun.Tuya es la recompensa. Todos los campeones, y son muchos, que intentaron salvarlo y fracasaron están en las mazmorras de mi fortaleza. Sus cabezas rodarán antes de que se celebre la boda.
-¿Me permites que los vea? -preguntó Finn.
-Te lo permito.
Finn fue a ver a los hombres y encontró en las celdas a los principales campeones de Irlanda.
-Si os salvo de la muerte, ¿me obedeceréis en todo? -preguntó Finn.
-Así lo haremos.
Entonces Finn volvió a presentarse ante el monarca y le preguntó:
-¿Me concederás la vida de esos campeones de Irlan­da a cambio de la mano de tu hija?
-Sí -respondió el rey.
Todos los campeones fueron liberados y ese mismo día se marcharon del castillo del rey. Desde entonces obedecieron ciegamente las órdenes de Finn, y así aquéllos fueron los primeros Fianna de Irlanda .


Original : Jeremiah Curtin.

sábado, 12 de noviembre de 2011

EL RITO SAGRADO DE UNIÓN DE MANOS.


El lugar

El rito de unión de manos puede hacerse en cualquier situación, desde prados embarrados bajo la llovizna hasta los pulidos patios de hoteles caros de ciudad, desde playas acariciadas por la brisa marina que hace que la espuma salte por encima de la arena, hasta la solemnidad mágica de un círculo de piedras neolítico. He llevado a cabo ritos en los jardines de casas particulares, en el drama del amanecer en Stonehenge, y en un laberinto de diseño en los terrenos colindantes de una casa señorial .

En gran bretaña hay un número limitado de lugares registrados para ceremonias que serán reconocidas como oficiales por la ley fuera de las iglesias cristianas. Sin embargo, muchas parejas asistirán al juzgado otro día, o encontrarán un lugar homologado con jardines o algún espacio verde donde la unión de manos puede llevarse a cabo.

LA PREPARACIÓN DEL LUGAR

Muchas veces merece el esfuerzo de hacer un rito de preparación para quitar del lugar cualquier energía poca apropiada para lo que va a hacerse. Desde luego, y sobre todo si el rito se realiza al aire libre, los espíritus de ese lugar (ancestrales y de la naturaleza más allá de la humanidad) debe honrarse, pidiendo y/o confirmando que ellos aceptarán y inspirarán el rito que va a hacerse.

Donde se desea y donde sea apropiado, puede crearse un espacio a modo de templo, con un círculo sagrado delineado y decorado como se requiere. Se crean muchos círculos de bodas con flores, ramas de árboles, lúpulos o maíz, dependiendo de la época del año. El círculo puede hacerse de acuerdo con la magia formal, o hecho informalmente, permitiendo que los invitados (y niños) salgan y entran según desean, pero incluso cuando este sea el caso, el círculo sirve para enfocar la atención de todos hacia el rito, y para fortalecer el rito en sí-

Un altar también ayuda en este sentido; la pareja estará plenamente metida en la ceremonia, pero los invitados pueden estar algo menos atentos. El altar puede hacerse de cualquier cosa, desde un tocón tapado a casi cualquier objeto que se encuentra a mano. Puede decorarse con flores o con follaje del estación, y se le pondrán encima las herramientas para consagrar y festejar, y otras cosas esenciales para el rito.

LOS PARTICIPANTES

Este rito está escrito para ser oficiado por una persona. Ésta podría ser un sacerdote entrenado en la tradición, cuyo papel es él de sostener el energía del rito y asegurar que el rito se celebre con la suficiente magia y honor. Sin embargo, para un rito menos formal o más privado, estas palabras, añadiendo más o quitando algunas, pueden ser entonadas por cualquiera de los presentes.

Es normal que el novio y la novia tengan al menos un testigo cada uno, pero algunas ceremonias de boda son realizados y vistas sólo por los dioses, los espíritus de los antepasados y los espíritus del lugar. Para algunos el papel de testigo lo cumple la(s) doncella(s) de honor, la(s) dama(s) de honor, el padrino o la madrina. En el rito descrito abajo, están presentes los padres. El grupo de asistentes puede ser tan grande o pequeño como el grupo desee.

LA CEREMONIA

La ceremonia en si es absolutamente flexible, adaptándose a los deseos de la pareja. He aquí un ejemplo, para usar como desees:

EL TEMPLO ESTA HECHO

Los acomodadores invitan a que los invitados se junten alrededor del extremo del círculo. El novio y el padrino se encuentran justo a fuera del círculo, próximos a la puerta. La sacerdotisa da la bienvenida a todos, resumiendo lo que va a ser la ceremonia. Llama a los espíritus del lugar para que el rito sea llevado a cabo bajo su guía e inspiración. Hace la llamada a la paz, girando a las cuatro direcciones.

Que haya paz en el este, que así sea.

Que haya paz en el sur, que así sea.

Que haya paz en el oeste, que así sea.

Que haya paz en el norte, que así sea.

Que haya paz a través de todos los mundos.

Que así sea.

Luego se declara el propósito del rito. Recuerda que muchas parejas en las tradiciones druídicas y paganas se casan con la misma persona varias veces, volviendo a consagrar sus lazos y poniendo al día sus juramentos de acuerdo con los cambios que surcan sus vidas Donde abajo indica (número), se refiere al número de veces que la pareja se hayan casado antes.

Nos juntamos aquí en paz para esta ocasión sagrada que es el (nº) rito de matrimonio entre (novio) y (novia). Como nuestro círculo se ha tejido y consagrado, este momento en el tiempo y este lugar se bendicen. Que cada alma esté en verdad aquí y ahora para que los espíritus de los aquí unidos pueden fundirse en un lugar sagrado, con un propósito y una sola voz.

El círculo se traza informalmente o mágicamente, dependiendo de lo que sea apropiada para el lugar y lo que sea deseado por la pareja. Puede consagrarse con incienso y agua.

Se honran los espíritus de los cuatro direcciones con palabras como éstas:

Llamemos a los espíritus de los cuatro cuadrantes de nuestro mundo, para que este rito sea bendito por los poderes de toda la creación.

Espíritus del norte, poderes del invierno, guardianes de la tierra y de la piedra, fuerza del tejón (o algo indicado por la pareja), que nos enseña el amor y la lealtad, gran oso del cielo estrellado, mi señora del vientre sagrado, la rica tierra de la creación, pido que honráis este círculo nuestro como nosotros os honramos. Sed testigos de este rito y dadle vuestra bendición. ¡Saludos y bienvenidos!

Espíritus del este, poderes de la primavera, de la concepción, la regeneración, la visión del halcón y el canto del mirlo, el libre vuelo de las golondrinas, (algo especificado por la pareja), silfos del viento, aliento de la vida, mi señor del sol saliente y de toda la vida nueva, pido que honráis a este círculo nuestro como nosotros os honramos. Sed testigos de este rito y dadle vuestra bendición. ¡Saludos y bienvenidos!

Espíritus del sur, poderes del verano, orgullo del ciervo y saber del zorro, dragones de la tierra, espíritus de la llama que baila, (algo sugerido por la pareja), vosotros que nos enseñáis coraje y el poder de la verdad, mi señor del bosque salvaje, pido que honráis este círculo nuestro como nosotros os honramos. Sed testigos de este rito y dadle vuestra bendición. ¡Saludos y bienvenidos!

Espíritus del oeste, poderes del otoño, gato que se estira a cazar cuando anochece, sabiduría del salmón y gracia de la nutria, (algo sugerido por la pareja) ,ondinas del alegre riachuelo , devas (espíritus de la naturaleza) que bailan nuestro amor y emoción, mi señora de las mares, mareas del ser, pido que honráis a este círculo nuestro como nosotros os honramos. Sed testigos de este rito y dadle vuestra bendición. ¡Saludos y bienvenidos!

Los tres mundos de la tierra, el mar y el cielo son honrados, para que sus bendiciones puedan inspirar al rito. Pueden usarse palabras como éstas:

Saludamos a los espíritus, los espíritus de la belleza, del poder y de la inspiración, de los altos cielos que nos piden que estiremos y crezcamos, los de la tierra oscura que nos sostiene y nos alimenta, los de los mares abiertos que bañan las costas de nuestras tierras sagradas, los que nos ofrecen libertad, acogida y renacimiento. Como nuestros antepasados conocían y honraban vuestro poder, así lo hacemos nosotros ahora.

Se hacen ofrendas a los espíritus del lugar.

LA ENTRADA DE LA NOVIA.

A algunas novias todavía les encanta la idea de hacer la gran entrada y ser concedidas por sus padres o por alguna figura paterna. Si este es el caso, puede usarse lo siguiente en el rito. Si no es el caso, ella puede empezar el rito al lado del novio.

La novia, con su padre, sus damas de honor y sus bardos, se acerca al círculo con tanto teatro como ella desea.

¿Quién trae a esta bella doncella para que se case en el día de hoy?

El padre de la novia: Yo lo hago.

Que se haga, pues.

El le guía hasta su sitio en el borde del círculo, al lado del novio. La sacerdotisa luego da la bienvenida al círculo a la pareja.

Nos reunimos hoy el (fecha), el (número) día de la (nombre) luna, en el año (fecha), en el ojo del sol y sobre esta tierra santa, para ser testigos a este sagrado rito de matrimonio entre (novio) y (novia), un rito que es una bendición y también una renovación de su preciosa unión. Para saber hasta dónde hemos llegado, honremos a quienes y que nos ha traído a este lugar.

SE HONRA A LOS ANTEPASADOS

El rito luego da cuenta de los que nos han dado la vida y nos han traído a este lugar.

En nombre de nuestros dioses y de los dioses de nuestros antepasados, damos las gracias por todos aquellos que han compartido con nosotros sus vidas, su sabiduría y su amor. En este día sagrado de su boda, damos gracias sobre todo por las bendiciones heredadas por (novia) y (novio) por sus antepasados de sangre y espíritu, los recién marchados y los antiguos. (nombres específicos como sean apropiados)

En particular honramos a (padres de la pareja), antepasados presentes en este rito en cuerpo y espíritu. Dando cuenta de todo lo que se ha dado, el sagrado don de la vida, las lecciones más duras dadas a través del amor y de las lágrimas , los lazos que se comparten y los individuos que sois, dejemos que éstos antepasados también se honran en este momento.

La pareja da regalos a sus padres en gracias, honrando sus líneas de sangre.

También llamamos a los espíritus de las tierras de su nacimiento. ( a la pareja: )

Habéis traído en el día ofrendas de la tierra, hierbas y frutas, de los paisajes de vuestra niñez. Ponedlas ahora sobre el altar, con cualquier otro símbolo o obsequio que hayáis traído como señal de respeto por tus antepasados de sangre y por los espíritus de aquellas tierras que os han nutrido y siguen dando la vida a vuestras familias.

La pareja ponen los objetos sobre el altar.

Antepasados, sepan lo que se ha hecho.¡Con gratitud les saludamos y les damos la bienvenida!

EL RITO DE MATRIMONIO

Que cada persona aquí reunida llame a este rito sagrado, a este sitio consagrado, los poderes que nosotros conocemos como las fuentes del amor y de la inspiración.

Tomemos unos momentos para ponernos en armonía con este Presencia para poder abrirnos del todo hacia la importancia de este momento y este lugar.

¿(novio) y (novia), acudís a este lugar por voluntad propia, libremente?

PAREJA: Así es

Honremos ahora las cuatro direcciones cardinales de nuestro mundo, para que sus bendiciones sean traídas a esta pareja.

Se lleva a la pareja alrededor del círculo, a cada una de las cuatro direcciones.

(este) ¡Espíritus del este, espíritus del aire, dejadnos sentir vuestro aliento!

A través de tiempos de incertidumbre, a través de los vientos del cambio, ¿todavía os amarais y os honrarais?

PAREJA: Sí lo haré/Sí lo haré

¡Entonces sed bendecidos por los poderes del este! Que juntos ENCONTRAR la libertad del vuelo por el aire claro de las montañas, que vuestro matrimonio renazca con cada nuevo amanecer.

(sur ) ¡Espíritus del sur, espíritus del fuego, dejadnos sentir vuestro poder!

A través de las llamas de la pasión, y cuando los llamas se disminuyan, ¿Todavía os amarais y os honrarais?

PAREJA: Si lo haré/Sí lo haré

¡Entonces sed bendecidos por los poderes del sur! Que juntos bailáis a lo largo del camino del coraje y de la vitalidad. Que vuestra casa se llene de calor.

(oeste) ¡Espíritus del oeste, espíritus del agua, dejadnos sentir vuestra energía que fluye a través de las corrientes del agua blanca y los pozos profundos y serenos de emoción. (a la pareja:) ¿todavía os amareis y os honrareis?

PAREJA: Sí lo haré/ Sí lo haré

Entonces sed bendecidos por los poderes del oeste. Que juntos tejáis y mezcláis vuestros deseos, fluyendo con la belleza de las mareas del océano. Que vuestra vida compartida se llene de amor.

(norte ) ¡Espíritus del norte, dejadnos sentir vuestra certeza!/seguridad

A través de tiempos de frías restricciones, cuando los problemas parecen inamovibles, ¿Todavía os amarais y os honrarais ?

PAREJA: Sí lo haré/Sí lo haré

Entonces sed bendecidos por los poderes de la tierra. Que juntos echáis raíces por tierra dulce y fértil, para que vuestra unión crezca fuerte. Que vuestras vidas juntos sean ricas con esa fertilidad y su( estado de)perfecta fruición.

Delante del altar, se juntan las manos y se las atan con cintas de tela.

En los lugares sagrados y en los momentos propicios, nuestros antepasados se cogieron de la mano al casarse, y tales juntas/uniones de manos (¿?????) , atestiguados por los dioses y por la comunidad, eran legales, verdaderas y comprometadoras ¿), tal como el amor ate un corazón a otro.

novia) y (novio) , ¿estáis preparados para declarar vuestros (¿renovados?) juramentos el uno al otro/a , juramentos que os juntarán, alma a alma, corazón a corazón, juntando las líneas sanguíneas de vuestros antepasados y las de vuestra descendencia, atestiguados por los que se han reunido aquí el día de hoy, en espíritu y en cuerpo, en este círculo sagrado?

PAREJA: Sí, lo estoy/Sí, lo estoy.

Todas las cosas de la naturaleza son circulares. La noche se hace día, el día conduce de vuelta a la noche que, una vez más, se convierte en día. La luna crece y mengua, y vuelve a crecer. Hay la primavera, el verano, el otoño y el invierno, luego vuelve de nuevo la primavera Éstas son las florecientes ritmos del Ciclo de la Existencia, pero en el Centro del Círculo hay la quietud de la Fuente, eterna y brillante.

(Novia) y (Novia), ¿ Habéis traído el día de hoy con vosotros vuestros símbolos de estos misterios de la vida?

PAREJA : Sí, lo hemos hecho .

El Padrino da los anillos al Sacerdote.

Que sean bendecidas pues en nombre de los viejos dioses de nuestra tierra, porque son una señal externa y un sagrado recordatorio de vuestro compromiso (el uno con el otro) atestiguado hoy aquí.

Los anillos se bendicen, se consagran y se ponen encima del altar.

Como el sol y la luna traen la luz a la Tierra, ¿vosotros (Novia) y (Novio),juráis traer a esta unión vuestra/ esto, vuestra unión…. la luz del amor y de la dicha?

PAREJA: Sí, lo hago / Sí, lo hago.

El Sacerdote bendice y consagra a la Vela nupcial . La vela puede encenderse en este momento, si es apropiado.

¿Juráis honrar el uno al otro/a tal como honráis aquello que tenéis más sagrado?

PAREJA: Sí, lo hago/ Sí, lo hago.

Se desata a las manos de la pareja, y la cinta se posa sobre el altar.

Cogiendo los anillos, el Sacerdote da uno al novio, quien lo pone en el dedo de la novia, luego el otro a la novia, quien hace lo mismo, y le formula a continuación sus juramentos personales

El Sacerdote bendice a la Piedra nupcial y la consagra.

La Tierra Sagrada es nuestro hogar. Nos ofrece el poder de la vida, nutriendo a nuestro cuerpo y alma , sosteniéndonos desde el nacimiento hasta que nos soltemos hacia /en los mundos de(l) espíritu. Cada roca y piedra, cada pedrusco y gema contiene dentro de sí las historias de todo el tiempo.

Habéis elegido juntos a esta piedra como cimiento y piedra prima de vuestro matrimonio a partir de este momento. ¿Ahora juráis sobre ella, como símbolo de esta tierra sagrada y de nuestra santa Madre Tierra, que os mantendréis fieles a vuestros juramentos?

La pareja posan sus manos sobre la piedra que sostiene el Sacerdote.

Que la Tierra sea testigo, pues, de que (Novia) y (Novio) se unen en amor y dicha y libertad. ¿Que así sea!

Coged ahora los regalos /obsequios de vuestras tierras natales y, mezclándolos, ofrecedlos a los espíritus de la tierra sobre la que hacéis vuestros juramentos, esta tierra que ahora es vuestro hogar.

La pareja mezclan los regalos / obsequios y los vierten sobre la tierra (donde se encuentran. )

Que vuestros juramentos se sellen con un beso.

La Pareja se besan. Las Damas de Honor y amigos les lanzan los pétalos de confeti y los granos de amor y fertilidad.

Que todos sean testigos de que (Novio) y (Novia) se unen/son/están unidos en amor como Marido y Mujer. A través de este (renovación de su) matrimonio, atestiguado y bendecido, que su amor se vista de la belleza, majestuosidad y poder de esta Tierra sagrada.

Mi propia bendición, y las bendiciones de todos los reunidos aquí estén con vosotros. La bendición de vuestros dioses y de los dioses de vuestros ancestros sea con vosotros. Con vosotros y con todo lo que nazca de vuestra unión. ¡Que así sea!

EL BANQUETE.

Dentro del Druidismo, el banquete tradicional es de pan y aguamiel. No obstante, éstos pueden sustituirse por (una) tarta y vino o sidra, o lo que se prefiera. Se da el pan a la Novia y al Novio el aguamiel/vino/sidra para que los sostengan mientras el Sacerdote da las bendiciones. Las palabras dadas aquí son generales, pero pueden invocarse deidades específicas.

Madre Tierra, en nombre de nuestros dioses, los dioses de nuestra tierra y de nuestros antepasados, nosotros te damos las gracias. Tú nutres nuestro cuerpo y alma con tus dones de belleza y abundancia. Como nos honras con el precioso don de la vida, así te honramos a ti.

Padre Cielo, en nombre de nuestros dioses, los dioses de nuestra tierra y de nuestros antepasados nosotros te damos las gracias. La luz del sol y las bendiciones de la lluvia caen sobre el cuerpo de nuestra madre, produciendo sus regalos.Como nos honra con tus bendiciones, asi te honramos a ti.

La pareja ofrecen el primero a la tierra, partiendo el pan y vertiendo el aguamiel, el segundo a los antepasados, luego el uno al otro / otra. Compartiéndolo con todos los presentes, llevan los panes y el cuerno alrededor del Círculo.

El rito del matrimonio se ha completado.

La pareja se juntan al Círculo.

LA ORACIÓN POR LA PAZ

Antes de que nuestra ceremonia finaliza y volvemos a los mundos mas allá, formemos el Círculo de todas las existencias, para que podamos compartir la dicha que hemos atestiguado. Levantemos nuestros pensamientos hacia los poderes que nos ofrecen la vida y la inspiración, sabiendo que los dones de belleza y amor recibidos en este rito son nuestros pare compartir, como bendiciones de sanación, protección y abundancia, para este planeta sagrado y todas las criaturas que viven en ella.

El Sacerdote conforma el círculo y se junta a ello por un momento de silencio/quietud.

Que el mundo se llene de amor, belleza y armonia .

TODOS: Que así sea.

LA CLAUSURA DEL RITO.

El rito se ha completado. Que nuestros recuerdos estén enriquecidos con ello/pro ello. Demos las gracias a los poderes de la naturaleza por su presencia/asistencia.

Se dan las gracias a los espíritus de las Cuatro Direcciones, los Tres Mundos, los antepasados y a otros que hayan sido invocados por el rito, mientras se cierre al Círculo.

Espíritus del norte, gran oso, fuerte tejón, leal perro, espíritus de la tierra, os damos las gracias por los dones de fuerza y firmeza para conseguir nuestro propósito…) que habéis traído al Círculo. Mi señora del vientre, que tus regalos/dones queden con esta pareja de hoy en adelante/a partir de este día. ¡Saludos y partid en paz!

Espíritus del oeste, gato cazador , sabio salmón, nutria burlón y sabia rana, os damos las gracias por los dones de profunda sabiduría y el libre flujo de la inspiración que habáis traído a nuestro Círculo. Mi Señora de los Mares, deje que tus dones sigan con esta pareja de hoy en adelante/a partir de este día. ¡Saludos y partid en paz!

Espíritus del sur, orgulloso ciervo, zorro veloz, espíritus del fuego, os damos las gracias por los dones de pasión y energía que habáis traído a nuestro Círculo Mi señor de los Verdes Bosques, deje que tus dones sigan con esta pareja de hoy en adelante/ a partir de este día. ¡Saludos y partid / parte en paz!

Espíritus del este, halcón, mirlo, alto águila, espíritus del aire, damos las gracias por los dones de claridad y visión afilada que habáis traído a nuestro Círculo. Mi Señor del sol naciente, que tus dones sigan con esta pareja de hoy en adelante/ a partir de este día. ¡Saludos y parte en paz!

Doy las gracias a todos los seres, visibles y también invisibles, que se han juntado/reunido hoy aquí. Que todos sean bendecidos, regresando a sus reinos en paz.

O Espíritu de este Lugar, te damos las gracias por tus bendiciones. Saludos, O antepasados, O grandes Dioses de antaño, os damos las gracias por vuestra presencia, por vuestra guía y vuestra inspiración. Que estos dones sigan con nosotros mientras os saludamos y nos despedimos.

Que el Círculo se abra para que estas bendiciones puedan compartirse, y para que dé comienzo el banquete. Sed bendecidos, como bendecidos sois. (Blessed be as blessed is)

El Círculo se deshace.

Esta celebración acaba en paz, tal como empezó. Que el espíritu de este rito y las bendiciones que hemos recibido vayan con todos nosotros mientras partimos de este lugar, para nutrir, fortalecer y sostenernos hasta que nos volvamos a encontrar. Que las bendiciones de este rito nutran, fortalezcan y sostengan a (Novia) y (Novio) a lo largo de su vida compartida / conjunta

¡Que así sea!”

La pareja encabezan la procesión que ahora deja atrás al círculo, seguidos por el Padrino y las Damas de Honor, padres y otros participantes, los invitados detrás/siguiéndolos a ellos. El Sacerdote es el último en dejar atrás al Círculo, haciendo las últimas oraciones de clausura.

Aquí acaba este rito.

¡Sed bendecidos tal como bendecidos estáis!

EL COPYRIGHT DE ESTE RITO SIGA PERTENECIENDO A THE BRITISH DRUID ORDER / EMMA RESTALL ORR 1999 / 2001